Los integrantes del proyecto Integral-b (Ainia Centro Tecnológico, Bionorte, Biogas Fuel Cell y Cidaut) han explicado uno a uno todos los pasos que permitirán confirmar que cada litro de biodiésel que salga de la planta de San Martín del Rey Aurelio sea plenamente sostenible. En la actualidad produce biocarburante a partir de aceites vegetales usados, pero gracias a la instalación piloto ya en funcionamiento consumirá energía eléctrica y térmica generada dentro de un proceso de obtención de biogás alimentado con los propios subproductos de la planta, glicerina principalmente, y otros residuos orgánicos procedentes del canal Horeca (hostelería, restauración y catering).
El objetivo del proyecto es demostrar la mejora de la sostenibilidad que se consigue en las plantas de producción de biodiésel que utilizan aceites vegetales usados cuando integran en la propia instalación sistemas para la valorización energética de los residuos del proceso conjuntamente con otros subproductos orgánicos complementarios.
En concreto, el proyecto Integral-B propone la integración en la propia instalación de un sistema de digestión anaerobia que consigue la transformación de los residuos orgánicos en biogás. El biogás producido junto con la glicerina excedentaria previamente purificada se utilizan como combustibles en un motor alternativo especialmente adaptado.
Ambos procesos de valorización ya se desarrollan en la actualidad por separado a escala industrial. Sin embargo, no existen experiencias ni se han evaluado suficientemente las ventajas medioambientales, energéticas y económicas de su integración en una misma instalación.
El nuevo modelo propuesto consigue un mejor aprovechamiento de los recursos contenidos en las materias primas, la mejora del balance energético del proceso y la obtención de unos beneficios económicos estables procedentes de la glicerina.ESQUEMA INTEGRAL-B
Más información:www.integral-b.com